El grupo de investigación del Centro de Investigación Biomédica ha diseñado un test psicológico capaz de detectar factores de riesgo asociados a un trastorno de la conducta alimentaria, como la bulimia o la anorexia nerviosa, que ayudará a aumentar la eficacia de programas de detección y prevención de estas enfermedades.
El cuestionario creado, dirigido por el doctor Fernando Fernández, se basa en 127 preguntas que analizan determinados factores que, durante la infancia, pueden ir asociados a la aparición de un TCA, tales como variables socio-demográficas específicas, preocupación por la imagen y el físico, hábitos y estilos alimentarios familiares, patrones emocionales y expectativas e ideales sociales y familiares de belleza.
Para probar la eficacia de esta herramienta, los especialistas han realizado un estudio, publicado en la revista 'Clinical Psychology & Psychotherapy', con una muestra representativa compuesta por 854 pacientes con desórdenes alimentarios y 784 sujetos sanos de cinco países europeos (Reino Unido, España, Austria, Eslovenia e Italia), en el que se examinaron las propiedades evaluativas del 'Cross-Cultural Questionnaire' (CCQ), nombre que recibe este test, en la detección de factores de riesgo para padecer TCA en distintos ámbitos culturales.
La relevancia de esta investigación, explican los autores del ensayo, radica en que, hasta el momento no existía una herramienta única que sirviera para identificar de forma global factores de riesgo asociados a los TCA y a la obesidad.
En este sentido, el nuevo test permitirá identificar a través de una herramienta "fiable y sencilla", indican, los factores que pueden favorecer la aparición de un TCA con mayor precisión y, por tanto, servir para mejorar las estrategias que conduzcan a su prevención.
Los test psicométricos son pruebas utilizadas con frecuencia en Psicología Clínica para la evaluación de pacientes, que además ayudan a la identificación y delimitación de la gravedad de los síntomas, perfiles específicos de personalidad, procesos emocionales y neurocognitivos.
Según apuntan los expertos del CIBERobn, los trastornos alimentarios han escalado posiciones en el ranking de las principales patologías que afectan a los adolescentes de los países desarrollados, constituyéndose como tercera enfermedad crónica, después del sobrepeso y el asma.
El cuestionario creado, dirigido por el doctor Fernando Fernández, se basa en 127 preguntas que analizan determinados factores que, durante la infancia, pueden ir asociados a la aparición de un TCA, tales como variables socio-demográficas específicas, preocupación por la imagen y el físico, hábitos y estilos alimentarios familiares, patrones emocionales y expectativas e ideales sociales y familiares de belleza.
Para probar la eficacia de esta herramienta, los especialistas han realizado un estudio, publicado en la revista 'Clinical Psychology & Psychotherapy', con una muestra representativa compuesta por 854 pacientes con desórdenes alimentarios y 784 sujetos sanos de cinco países europeos (Reino Unido, España, Austria, Eslovenia e Italia), en el que se examinaron las propiedades evaluativas del 'Cross-Cultural Questionnaire' (CCQ), nombre que recibe este test, en la detección de factores de riesgo para padecer TCA en distintos ámbitos culturales.
La relevancia de esta investigación, explican los autores del ensayo, radica en que, hasta el momento no existía una herramienta única que sirviera para identificar de forma global factores de riesgo asociados a los TCA y a la obesidad.
En este sentido, el nuevo test permitirá identificar a través de una herramienta "fiable y sencilla", indican, los factores que pueden favorecer la aparición de un TCA con mayor precisión y, por tanto, servir para mejorar las estrategias que conduzcan a su prevención.
Los test psicométricos son pruebas utilizadas con frecuencia en Psicología Clínica para la evaluación de pacientes, que además ayudan a la identificación y delimitación de la gravedad de los síntomas, perfiles específicos de personalidad, procesos emocionales y neurocognitivos.
Según apuntan los expertos del CIBERobn, los trastornos alimentarios han escalado posiciones en el ranking de las principales patologías que afectan a los adolescentes de los países desarrollados, constituyéndose como tercera enfermedad crónica, después del sobrepeso y el asma.